La reciente propuesta del Gobierno Nacional de gravar con un IVA del 19% las plataformas de juegos de azar online ha generado gran preocupación entre los operadores del sector.
Asojuegos, la Asociación Colombiana de Operadores de Juegos, advirtió que esta medida podría tener consecuencias devastadoras, no solo para la operación de los juegos legales en el país, sino también para la sostenibilidad de los recursos destinados al sistema de salud, que dependen en gran medida de las transferencias generadas por esta industria.
Como argumento principal se destaca que el recaudo de $2,1 Billones por IVA, que presupuesta el Ministerio de Hacienda en estos juegos, es imposible; en las Apuestas en Línea un usuario de estas plataformas realiza un depósito en su cuenta de jugador y con ese mismo monto puede apostar varias veces, alcanzando un promedio de hasta seis veces el valor original depositado.
La propuesta del Gobierno, donde estiman apuestas por 35.6 billones para el año 2023, no grava dinero real, sino créditos para participar en los juegos. Los ingresos reales de los operadores, quienes tienen contratos con Coljuegos, fueron de 2,1 billones para el mismo año. Pretender aplicar un Iva que equivaldría al 100% de los recursos que manejan los operadores es completamente inviable.
Según los datos más recientes, las transferencias de derechos de explotación al sistema de salud por parte de los operadores de juegos online pasaron de $3.496 millones en 2017 a $317.977 millones en 2023, con una cifra acumulada en lo que va del 2024 de $181.628 millones. Esto significa que en menos de una década, el aporte de esta modalidad ha crecido un impresionante 914%, contribuyendo significativamente al bienestar social del país.
“Si se aplica el IVA, el retorno al jugador se vería reducido del 93% a un 71%-75%, esto haría que los jugadores migren a plataformas ilegales o internacionales que no están sujetas a estas cargas fiscales, lo que incrementaría la informalidad y disminuiría los ingresos del sector», aseguró Juan Carlos Restrepo Presidente de Asojuegos.
Hay que destacar que las plataformas ilegales, que ya representan una competencia desleal para los operadores autorizados, no están sujetas a las mismas normativas fiscales ni a las responsabilidades de juego responsable, lo que les permite ofrecer mejores condiciones a los jugadores sin las restricciones que enfrentan las plataformas legales. Esto pone en desventaja a las empresas que operan bajo la regulación de Coljuegos, el ente encargado de supervisar la industria en el país.